UA-67049947-1

5 may 2010

Tu en tu casa, nosotros en la hoguera


...Ella me besaba y me besaba y me besaba mientras los pies danzaban al son de la cuerda del reloj que giraba y giraba
Y yo que me creía cuerdo me até la soga al cuello al jurarle amor eterno. Me condené al averno.
¿Para qué iba a querer amor en mitad de aquél infierno? Ella quería la mitad que no tengo. Vengo envuelto en llamas.
Flameado a base de whisky, clamando al cielo que me llame antes de que derrame mis sesos contra el asfalto al lanzarme de esta azotea.
Voy a untarme en brea y fumarme un porro como cuatro de vosotras viejas arpías le grito a las estrellas. Pero no me oyen. Al fin y al cabo están muertas.
Ojalá ella lo estuviera, ojalá no la viera pasear cogida de cualquier cartera llena. Pero no es así, y la veo pasar y me menguo.
A pesar de pensar que soy idiota, pues pensando en lo que tuve malgasto lo que tengo. ¿Más que tengo? Este tango y la idea de prolongarlo hasta el amanecer.
De estrechar sus labios entre los mios otra vez. ¿Ves? Otra vez la mento y miento si digo que lamento haberla conocido.
Lo único que siento es no haberlo reconocido a tiempo porque ahora el espejo me grita que me hago viejo para esto. Y no tengo a nadie a quien culpar maldita sea
Nadie a quién satirizar y en quién hacer caer la culpa de todos los errores del pasado. Nadie a quién amar que me haga olvidar aquella disculpa a la que aún estoy atado.
Aún ensayo al espejo que la encuentro y hago acopio de fuerzas y me declaro. Y mi reflejo me devuelve la mirada con descaro y me dice: "Claro". Mi propio espejo se ríe de mí sin disimulo y corro a por opio y lo olvido todo....o al menos lo simulo.

Poesía de guerra cada vez más cerca
Soy más de Lolita que de Tadzio.
Más de que me destroce que de que me salve.
Más de que me hunda en el fango que de que me haga brillar.
Más de que me atraviese el corazón a que me traspase sin más.