UA-67049947-1

19 jul 2009

¿Que quieres?




¿Que quieres?
A menudo nos preguntan eso. Con demasiada frecuencia no sabemos exactamente que contestar, al menos yo. ¿Que quieres? No es tan sencillo. Pensadlo. Pensad en una lampara mágica, un genio emergiendo de esta y formulandoros la pregunta mágica. ¿Que quieres? ¿Dinero? ¿De verdad es eso lo que va a cambiarlo todo? ¿Quieres una fortuna? No, claro que no. No sé que quiero señor genio. Paso las horas...¿cómo? No se como paso las horas. No me importa. Las paso. Es lo único que sé. El reloj avanza. Y a mi me importa una mierda. Puede seguir avanzando, puede detenerse. Puede dar volteretas señor genio, que a mí no me importa. Y lo peor es que no hay razón. No, da igual todo lo que penseís todos los que me conoceís. Da igual lo que yo piense mañana, o pensé ayer. En lo más profundo hay una verdad absoluta. No hay razón. Ni siquiera hay una puta razón. Ni siquiera tengo un nombre que gritar desconsolado y borracho. Marta. Carmen. Son nombres bonitos para gritar borracho y llorando, con el corazón roto. Pero mi corazón no está roto. Y si lo está no se queja. Simplemente no está. No late emocionado cuando unos ojos me miran fijamente. No late emocionado nunca. Vanesa...ese también es un nombre bonito que gritar borracho. Pero Vanesa no existe. Señor Genio. Devuelvame mis ganas de vivir.

HASTÍO. (Del ant. fastío.) m. Repugnancia. II fig. Tedio, disgusto.
'hastío' también aparece en estas entradas
cansancio - empalagar - empalago - esplín - hastiar - lata - muermo - saturación


1 comentario: