UA-67049947-1

13 ene 2011

John Crawford Walker


Rascó la cerilla en el canto de su escritorio y encendió el cigarrillo. El fuerte y penetrante olor a tabaco negro barato impregnó la habitación con más intensidad. En cualquier caso el olor jamás parecía abandonarla del todo pese a los intentos de su secretaria. Cogió el whiskey y llenó una copa hasta la mitad, la alcanzó a su antiguo amigo sentado al otro lado de la mesa. Llevaba años sin tener la más mínima noticia de él. De hecho, llevaba años sin tener la más mínima noticia de casi nadie de los viejos tiempos. No le parecía mal, la vida cambia. Pero sobre todo la gente. La gente sí que cambia.

-Gracias Walker-dijo Shepherd. Aún le llamaba Walker. Hacía mucho que nadie le llamaba así. El mote había nacido a raíz de que se llamaba John y le gustaba abusar del whiskey. Shepherd bebió un trago en silencio. Los ojos de Shepherd recorrieron el despacho de Johnny. La mayoría de detectives privados de la zona tenían un despacho lúgubre y oscuro, sacado directamente de un libro de tópicos. John no. En las paredes había colgado recortes de artículos de periódico, incluso un poster de Bob Dylan. Y además, tenía secretaria. Le iba bien y no creía que tuviese que negarlo. Se preguntó qué había traído a Shepherd hasta allí, si no recordaba mal ahora vivía en Philadelphia. Probablemente quería pruebas de que su mujer le engañaba y esperaba que el viejo Johnnie se lo hiciese por el mínimo. Iba listo. John Crawford no hacía descuentos ni a su señora madre, Dios la tuviese en la gloria que jamás gozó en vida. Se echó hacia atrás el pelo grasiento y engominado con la mano del cigarrillo y tratando de parecer cordial preguntó:

-¿Y bien?

Shepherd se llevó el vaso a la boca y bebió un largo trago. Le dirigió una mirada profunda, estudiándole. Años atrás bromeaban con el hecho de que Shepherd podía leer el alma de la gente a través de su expresión. John rezó porque no fuese cierto.

-Te vi en la tele-contestó Shepherd. Y sacó un paquete de Marlboro de un bolsillo de la chaqueta. Después lo encendió con un gran encendedor de plata.

John se acordaba. Los medios le habían abordado y filmado mientras salía de la escena de un crimen muy importante.

-¿Salí guapo?-preguntó Johnny socarronamente mientras apagaba el cigarrillo en el cenicero de la mesa. Se estaba hartando de jugar.

-Se han cargado a Mike-dijo Shepherd de repente-Degollado en su propia cama.


Podéis leer el resto pinchando:

aquí

Espero que os guste mis pequeños monstruitos :)

3 comentarios:

  1. No dudes de que me lo leeré en MUY breves ;)

    ResponderEliminar
  2. Lo haremos, oh Monstruoso Gran Creador.

    ResponderEliminar
  3. Puedo pinchar ahí, en el correo, en el evento, en tu tablón...

    - Te vi en la tele.
    - ¿Salí guapo?.
    -¡Se han cargado a Mike!

    ...chán chán cháan! :D

    ResponderEliminar