UA-67049947-1

5 oct 2009

Único (PLUS)




No sentí que ella era la mujer de mi vida, o que era mía o tenía que conseguir como fuera que así fuese. Sentí que no me importaba nada más a continuación, porque yo era suyo, y lo sería por siempre. Me levanté y fuí hacia ella. Cuando llegué a su altura sentí deseos de arrancarme el corazón y postrarme ante ella para ofrecérselo, para que hiciese lo que gustase con él que a mi no me importaba, ya no. Al fin y al cabo aunque este seguía latiendo en mi pecho ya no era mío en realidad, ya no estaba en mi pecho por mucho que sus latidos me dijesen lo contrario. Ahora estaba en sus manos, por y para siempre.


Cuando me monté en el asiento del copiloto de Nitro un hedor asaltó mis pulmones. Sangre, aquel coche apestaba a sangre. No, en realidad no, apestaba a sed de sangre. Pero muy pronto una casa si que iba a apestar a sangre, joder, y como iba a apestar...
Desenfundé a Derg y a Virg mientras Nitro hacia lo propio con sus revólveres.

-Sin piedad-dijo Nitro

En otros tiempos más felices Alex hubiese dicho su siguiente frase, pero en lugar de eso Nitro y yo lo hicimos a la vez por él.

-Sin duda-dijimos
-¡¡SIN PRISIONEROS!!-aullé enfurecido

Y nos lanzamos a la muerte con el semblante crispado, los dedos en el gatillo y los gritos rajando el cielo


Yo le rezo a un dios que me prometió ... que cuando esto acabe no habrá nada más

Pero si hay algo capital, algo de veras imporante es que me voy a morir, y cuando digo voy, es VOY


2 comentarios:

  1. Oh que bello texto, te ha faltado mencionar algo sobre Perderse en su seCso...asi habría triunfado SEEEGURO!

    ResponderEliminar
  2. Ya iba siendo hora, demasiado tiempo sin leerte!
    Te estas convirtiendo en una droga, tendré que desengancharme o morir de sobredosis.

    ResponderEliminar